Durante los últimos años, el desarrollo de tecnologías basadas en la inteligencia artificial ha permitido a investigadores y científicos soñar con crear dispositivos capaces de mejorar la vida de pacientes totalmente paralizados y sin expectativas de poder comunicarse.
Las personas que están “encerradas”, esto es, totalmente paralizadas por un derrame cerebral o una enfermedad neurológica, tienen problemas para intentar comunicar incluso una sola frase. A través de la implantación de electrodos en una parte del cerebro involucrada en el movimiento se ha conseguido que algunos pacientes paralizados puedan mover un cursor y seleccionar letras en una pantalla con sus pensamientos. Sin embargo, hasta el momento únicamente se había logrado que los usuarios escribieran hasta 39 caracteres por minuto, tres veces más lento que la escritura natural.
En un estudio de Willet et. al publicado en 2019 se utilizó a voluntarios paralizados de cuello para abajo. Les pidieron que imaginaran su brazo moviéndose y escribiendo las letras del abecedario mientras los investigadores medían la actividad cerebral. A través de este proceso, los científicos entrenaron un modelo informático basado en inteligencia artificial, conocido como red neuronal, para interpretar los comandos, trazando de este modo la trayectoria prevista de la punta del “lápiz imaginario” para crear cada una de las letras.
Eventualmente, el modelo computacional podría leer las oraciones imaginadas del voluntario con aproximadamente un 95% de precisión a una velocidad de aproximadamente 66 caracteres por minuto, casi el doble de lo conseguido hasta ahora.
Los investigadores esperan que la velocidad aumente con la práctica y, a medida que se mejore esta tecnología, también se puedan utilizar los registros neuronales para comprender mejor cómo el cerebro planifica y orquesta los movimientos motores finos.
